La RB no debe confundirse con las rentas de inserción y demás subsidios condicionados propios del Estado de Bienestar ni con el Impuesto Negativo sobre la Renta.
Que la definición de la RB sea tan clara como culaquiera de las ofrecidas no ha impedido que a lo largo de estos ultimos años hayan proliferado dos tipos de confusiones. En primer lugar, bajo diferentes denominaciones diversos autores se han referido a lo mismo. Así el mismo concepto de la RB ha recibido nombres como los de "subsidio universal garantizado", "ingreso básico universal", "ingreso ciudadano" o " ingreso mínimo", entre otros. En cualquier caso, lo que importa no son los nombres, sino lo que se entiende realmente por cada una de las denominaciones que se utilicen.
El segundo tipo de confusión es el contrario:bajo la misma denominación se han querido expresar, a menudo, conceptos muy diferentes.En primer lugar, no debe confundirse la RB con los diversos subsidios condicionados propios del Estado de Bienestar que existen actualmente, en los que la percepción de los beneficios fiscales, más generosos o menos, está condicionada a la verificación, por parte del sector publico, de la suficiencia de los ingresos recibidos en el mercado laboral. Un ejemplo de ello representa el caso de la Comunidad autonoma Vasca que aprobó, a finales de 2000, una ley que introducia una "RB" que consistía en algo harto diferente de lo que se trata aquí, pues se hacía efectiva precisamente bajo determinadas condiciones, no de forma universal. Hay, en definitiva, claras diferencias entre la RB y las rentas mínimas de inserción (PIRMI), que en el Reino de España son pagadas por la mayoria de la Comunidades Autónomas y que en la republica Francesa ofrece la administración central.
En general, este tipo de medidas (las rentas mínimas) son mecanismos, mas o menos generosos de lucha contra la pobreza y de inserción social, propios de determinados Estados de Bienestar.Por el contrario, la Renta Basica no es sólo un mecanismo de lucha contra la pobreza, sino que, como derecho de ciudadania que es, supone un mecanismo que incrementa la libertad real de la personas. Otra cosa es que, en la concreción de las diferentes propuestas, estas puedan parecer similares pero, en su fundamento y justificacion, son realmente diferentes.
En segundo lugar, tampoco debe confundirse la RB con el llamado "Impuesto Negativo sobre la Renta" (INR).
El INR que es un credito impositivo uniforme y reembolsable, que garantiza un nivel minimo mediante las politica fiscal: si en la declaracion de ingresos se supera ese mínimo, se pagan los impuestos correspondientes; si, por el contrario, no se supera o se carece de ingresos, el estado abona la difenrencia hasta alcanzar el minimo establecido. El INR, propuesto inicialmente por Milton Friedman con el objetivo de recortar el Estado Bienestar, fue explorado con mayor profundidad por James Tobin como forma de luchar contra la pobreza sin eliminar los incentivos al empleo.
Aunque comparte con el INR la necesidad de un sistema fiscal potente y consolidado que permita un nivel recaudatorio importente y que excluya ( o reduzca a su minima expresión) el llamado fraude fiscal, la RB presenta tres ventajas respecto a un INR. En primer lugar, cualquier programa de INR alcanzaría los efectos deseados sobre la pobreza sólo en el caso de que se complementara con un sistema de pagos por adelantado suficientes para mantener a la gente alejada de la pobreza hasta que se examinaran sus declaraciones de impuestos al final del ejercicio fiscal.
Además, aun en tal caso, a juzgar por lo que se sabe acerca de los programas de asistencia social, la ignorancia y la confusión constituyen un obstáculo que contribuiria a que algunos se quedaran sin acceso a estos pagos anticipados. Que las ayudas sean recibidas por el mayor porcentaje de gente es de suma importancia si de los que se trata es combatir la pobreza. Y de eso es un objetivo que un programa de RB garantiza por definición. En segundo lugar, aunque en principio un INR puede se individual, funciona de forma má natural y se propone generalmente para el nivel de los domicilios familiares.
En efecto , así ha sido propuesto en la mayoria de las ocasiones. Como resultado, incluso si la distribucion intra-domiciliaria de ingresos fuera exactamente la misma bajo un INR que bajo una RB equivalente, la distribucion intra-domiciliaria sería mucho menos desigual bajo la segunda. En particular, en las actuales circunstancias, los ingresos que directamente beneficiasen a las mujeres serían considerablemente superiores con un RB que con un INR, puesto que este ultimo tiende atribuir al que mayores ingresos tiene una parte del credito fiscal del compañero con menores o nulos ingresos.
En tercer y ultimo lugar , la RB favoreceria en mayor grado que un INR las posibilidades de solventar un importante problema asociado a la llamada "trampa del desempleo" que, pese a ser generalmente obviado por los economistas, es muy tenido en cuenta por los trabajadores sociales. El hecho de que buscar o aceptar un trabajo tenga sentido para una persona en paro no depende sólo de diferencia de ingresos entre trabajar o no trabajar. Lo que determina que la gente salga o no a trabajar es a menudo el miedo razonable a la incertidumbre. Mientras se está a prueba en un nuevo empleo, o justo después de perder uno, el flujo regular de ingresos se interrrumpe con frecuencia. El riesgo de retrasos administraticos puede hacer que la gente se agarrre a los subsidios como la más sabia opcion, especialmente cuando se tiene un limitado conocimiento de los propios derechos y cuando existe un miedo razonable a caer en endeudamiento y no se dispone de ahorros para salir adelante. Al contrario que un sistema basado en la lógica del INR , una RB proporciona un fuente firme de ingresos que continuá fluyendo tanto si se trabaja como si no . Así , la seguridad en los ingresos que continua fluyendo tanto si se trabaja como si no. Así la seguridad en los ingreos que proporciona un RB facilita la salida al mercado de trabajo en busca de un nueva ocupación.
Que la definición de la RB sea tan clara como culaquiera de las ofrecidas no ha impedido que a lo largo de estos ultimos años hayan proliferado dos tipos de confusiones. En primer lugar, bajo diferentes denominaciones diversos autores se han referido a lo mismo. Así el mismo concepto de la RB ha recibido nombres como los de "subsidio universal garantizado", "ingreso básico universal", "ingreso ciudadano" o " ingreso mínimo", entre otros. En cualquier caso, lo que importa no son los nombres, sino lo que se entiende realmente por cada una de las denominaciones que se utilicen.
El segundo tipo de confusión es el contrario:bajo la misma denominación se han querido expresar, a menudo, conceptos muy diferentes.En primer lugar, no debe confundirse la RB con los diversos subsidios condicionados propios del Estado de Bienestar que existen actualmente, en los que la percepción de los beneficios fiscales, más generosos o menos, está condicionada a la verificación, por parte del sector publico, de la suficiencia de los ingresos recibidos en el mercado laboral. Un ejemplo de ello representa el caso de la Comunidad autonoma Vasca que aprobó, a finales de 2000, una ley que introducia una "RB" que consistía en algo harto diferente de lo que se trata aquí, pues se hacía efectiva precisamente bajo determinadas condiciones, no de forma universal. Hay, en definitiva, claras diferencias entre la RB y las rentas mínimas de inserción (PIRMI), que en el Reino de España son pagadas por la mayoria de la Comunidades Autónomas y que en la republica Francesa ofrece la administración central.
En general, este tipo de medidas (las rentas mínimas) son mecanismos, mas o menos generosos de lucha contra la pobreza y de inserción social, propios de determinados Estados de Bienestar.Por el contrario, la Renta Basica no es sólo un mecanismo de lucha contra la pobreza, sino que, como derecho de ciudadania que es, supone un mecanismo que incrementa la libertad real de la personas. Otra cosa es que, en la concreción de las diferentes propuestas, estas puedan parecer similares pero, en su fundamento y justificacion, son realmente diferentes.
En segundo lugar, tampoco debe confundirse la RB con el llamado "Impuesto Negativo sobre la Renta" (INR).
El INR que es un credito impositivo uniforme y reembolsable, que garantiza un nivel minimo mediante las politica fiscal: si en la declaracion de ingresos se supera ese mínimo, se pagan los impuestos correspondientes; si, por el contrario, no se supera o se carece de ingresos, el estado abona la difenrencia hasta alcanzar el minimo establecido. El INR, propuesto inicialmente por Milton Friedman con el objetivo de recortar el Estado Bienestar, fue explorado con mayor profundidad por James Tobin como forma de luchar contra la pobreza sin eliminar los incentivos al empleo.
Aunque comparte con el INR la necesidad de un sistema fiscal potente y consolidado que permita un nivel recaudatorio importente y que excluya ( o reduzca a su minima expresión) el llamado fraude fiscal, la RB presenta tres ventajas respecto a un INR. En primer lugar, cualquier programa de INR alcanzaría los efectos deseados sobre la pobreza sólo en el caso de que se complementara con un sistema de pagos por adelantado suficientes para mantener a la gente alejada de la pobreza hasta que se examinaran sus declaraciones de impuestos al final del ejercicio fiscal.
Además, aun en tal caso, a juzgar por lo que se sabe acerca de los programas de asistencia social, la ignorancia y la confusión constituyen un obstáculo que contribuiria a que algunos se quedaran sin acceso a estos pagos anticipados. Que las ayudas sean recibidas por el mayor porcentaje de gente es de suma importancia si de los que se trata es combatir la pobreza. Y de eso es un objetivo que un programa de RB garantiza por definición. En segundo lugar, aunque en principio un INR puede se individual, funciona de forma má natural y se propone generalmente para el nivel de los domicilios familiares.
En efecto , así ha sido propuesto en la mayoria de las ocasiones. Como resultado, incluso si la distribucion intra-domiciliaria de ingresos fuera exactamente la misma bajo un INR que bajo una RB equivalente, la distribucion intra-domiciliaria sería mucho menos desigual bajo la segunda. En particular, en las actuales circunstancias, los ingresos que directamente beneficiasen a las mujeres serían considerablemente superiores con un RB que con un INR, puesto que este ultimo tiende atribuir al que mayores ingresos tiene una parte del credito fiscal del compañero con menores o nulos ingresos.
En tercer y ultimo lugar , la RB favoreceria en mayor grado que un INR las posibilidades de solventar un importante problema asociado a la llamada "trampa del desempleo" que, pese a ser generalmente obviado por los economistas, es muy tenido en cuenta por los trabajadores sociales. El hecho de que buscar o aceptar un trabajo tenga sentido para una persona en paro no depende sólo de diferencia de ingresos entre trabajar o no trabajar. Lo que determina que la gente salga o no a trabajar es a menudo el miedo razonable a la incertidumbre. Mientras se está a prueba en un nuevo empleo, o justo después de perder uno, el flujo regular de ingresos se interrrumpe con frecuencia. El riesgo de retrasos administraticos puede hacer que la gente se agarrre a los subsidios como la más sabia opcion, especialmente cuando se tiene un limitado conocimiento de los propios derechos y cuando existe un miedo razonable a caer en endeudamiento y no se dispone de ahorros para salir adelante. Al contrario que un sistema basado en la lógica del INR , una RB proporciona un fuente firme de ingresos que continuá fluyendo tanto si se trabaja como si no . Así , la seguridad en los ingresos que continua fluyendo tanto si se trabaja como si no. Así la seguridad en los ingreos que proporciona un RB facilita la salida al mercado de trabajo en busca de un nueva ocupación.
Comentarios